Habitación de Yaoite Ryo

Vaya, asique era por eso.
-Entonces, duerme.-dejo la taza de café vacía sobre su plato y me inclino, besandole suavemente en la frente.-Yo iré a mi habitación a ducharme.

Al decir aquello me levante como si tuviera un resorte.
- ¿¡Te vas!? -
Medio grite, apenado.

Me sorprendí ante el salto que practicamente dió en la cama.
-Es para ducharme. Además-añado, levantandome y cogiendo mi camisa, poniendomela.-tengo que ir igualmente para cambiarme, asique mejor me ducho allí.
Me vuelvo a acercar, sentandome nuevamente en la cama, junto a él.
-Descansa, ¿vale? Yo me quedaré en mi habitación después, preparando un par de cosas, asique, cuando quieras, sólo ven, ¿de acuerdo?-le acaricio la mejilla, para seguidamente pellizcarla-Y ponte algo de ropa.

Me sentia muy solo nada mas pensar que el se iba a ir.
- Vale... ¿pero volveras? -
Me sente en la cama, mirandolo tristemente.

Chasquee la lengua al ver la expresión triste que ponía. ¿Cómo resistirse a eso?
-Si te pones algo de ropa en menos de 1 minuto, te vienes conmigo y duermes en mi cama mientras yo hago lo que tengo que hacer.-propongo, levantandome tranquilamente de la cama.

Me sorprendi ante su proposicion.
- ¿Eh? Bueno, me da igual donde sea, conque este contigo...-
Le dije totalmente sonrojado.

Le tomo de la barbilla, obligandole a mirarme fijamente a los ojos, haciendo yo lo mismo.
-También te puedo llevar sólo con la toalla hasta mi habitación...Sería un gran secuestro.-digo, haciendo el gesto de ir a tomarlo de la cintura para subirlo a mi hombro y llevarlo en bolandas.

Me sonroje ante la idea.
- P-Pero nos verian... si no hubiera nadie conocido... no me importaba...-
Me lamente seriamente, odiaba tener que estar a escondidas.

Le doy un breve beso en los labios.
-Entonces, a vestirse se ha dicho. Por cierto-digo, llevandome una mano a la barbilla, pensando durante unos momentos antes de continuar-después de comer podríamos ir a darnos un chapuzón, ¿que te parece?

Me levante de la cama, me quite la toalla, sin recordar que andaba desnudo, avergonzandome por ello.
- Eehh, claro, vamos luego.-

Me quede observandole fijamente tras quitarse la toalla.
-Lo reafirmo: tienes un lindo trasero.-digo sin tapujos.

Me sonroje mas al oirlo.
- Pues... es todo tuyo...-
Dije agachandome para coger la ropa del cajon.

-Por supuesto, es más que evidente.-sonrío pervertidamente para despues dejarme caer de espaldas sobre la cama, colocando las manos tras la nuca.-Si quieres, llévate el bañador puesto. Así luego no tienes que cambiarte.

Asenti, abriendo otro cajon, tomando el bañador. Me lo puse, era un pequeño slip, lo habia comprado por si la ocasion caia, y era evidente que cayo.
- ¿te gusta? -
Le mostre girandome.

Ante la pregunta, me incorporo, apoyandome en los codos...mirando el bañador fijamente, además de todo su cuerpos en general.
-Mucho...no sabes cuanto. Eso sí, tendré que estar pendiente de que ningún depravado se te acerque.-frunciendo ligeramente el ceño.

Me mire ligeramente, sabia que era provocativo, pero no para que se me tirasen encima.
- No te preocupes, no suelen mirarme demasiado.-

-Si, claro.-aún con el ceño fruncido, sin creerme lo que me decía. Quién no se fijase en él, es que estaba ciego, aunque casi mejor que no se fijasen, pero aún así era extraño que no lo hiciesen porque...-Aghs!-me revuelvo el pelo y vuelvo a mirarle, cruzandome de brazos.-El caso es que no voy a dejar que se te acerque nadie, ¿entendido?

Me encogi de hombros asintiendo, me puse unos shorts encima del bañador y una camiseta algo ancha y mas bien larga. Tome unas sandalias metidas por el dedo, y una toalla.
- Bien, yo estoy listo, y tenemos la excusa de ir al agua, por si sospecha la gente.-

Me levanto y tomandole de la mano, me dirijo hacia la puerta de la habitación.
-Ya te dije que yo me encargaría de eso, asique no te preocupes. Por lo pronto, quiero darme una buena ducha.

Entrelace los dedos cuando tomo mi mano, bastante avergonzado.
- Está bien... Confio en ti.-
Me agarre a su brazo, dandole un pequeño beso.