Habitación de Yaoite Ryo

Me abrace al cuello de Menou, oliendo su aroma, olia delicioso.
- Hum... con todo eso tendremos de sobra...-
Note como un poco de los restos de Menou salia de dentro mio, haciendome estremecer.

-¿Um? ¿Tienes frío?-pregunto, al notar su estremecimiento, abrazandolo un poco más fuerte.-Y lo del desayuno...la verdad es que soy algo glotón.-confieso, sonriendo levemente.

Me sonroje por su pregunta, y negue con la cabeza, llevando una de mis manos a mi trasero, recogiendo los restos y mostrandoselo.
- Creo... me ire a lavarme un poco.-
Me levante, algo dolorido, sonriendole.
- No te lo vayas a comer todo, dejame algo.-

-Si, mejor ve a ducharte tu antes o acabaremos como hace unos momentos.-sonrío perversamente, viendo como desde su trasero comenzaban a bajar los restos de mi marca, satisfecho.-Y no te preocupes, te esperaré para comer.

Asenti levemente, dirigiendome al baño. Abri el grifo del agua caliente, que se calento en un poco de tiempo, lavandome el cuerpo, dejando las zonas mas usadas bien limpias. Una vez termine, me seque con una toalla, anudada a la cintura.

Tras verlo entrar al baño, me dejo caer de espaldas sobre la cama, estirandome para desperezarme, aprovechando de quedarme tumbado mirando distraídamente el techo. El sonido de unos golpes en la puerta me devuelve a la realidad, haciendo que me levante rapidamente, colocandome los pantalones y abriendo la puerta, recibiendo lo pedido y volviendola a cerrar, dejando las cosas en una mesita al lado de la cama.
-Por fin, mi café.-digo, tomando la cucharilla y moviendo el contenido antes de darle un buen sorbo.

Cuando sali del baño encontre que ya habia traido el desayuno, y vi que Menou estaba con el cafe.
- ¿Ya llego? Bueno voy a comer, tengo hambre. -
Con la toalla anudada todavia a la cintura, me sente al lado de Menou, tomando una tortita.

-Sírvete.-respondo distraídamente, con el borde de la taza de café apoyada en mis labios del mismo modo. Ahh, que bien se estaba así, tranquilo, sin prisas, disfrutando de las pequeñas cosas.

Cogi mi taza con leche, y le añadi algo de azucar, y tambien habia colacao, asi que tambien le añadi. Tome otra tortita, mojandola en sirope de chocolate.
- ¡Esta deliciosa! -

Al escuchar su exclamación me giré a mirarle, apartando el café.
-Déjame probarlo.-digo, haciendole un gesto con el dedo para que se acercara y me diera un bocado.

Mire que me quedaba un trozo, ya que el me lo pedia, se lo puse en la boca, pero fui y mordi el trozo que quedaba fuera de sus labios, rozandolos suavemente, dandole un pequeño beso. Me separe, relamiendo mis labios llenos de sirope.

Mastiqué el trozo, complacido por el suave roce de labios al aber tomado Ryo lo que sobresalía. Me inclino hacia el, tomandolo de la barbilla para acercarle a mi y lamerla en la comisura de los labios, donde quedaban aun restos del sirope.

No sabia que yo mismo podia ser tan atrevido, pero estar con Menou me hacia ser asi. Me sonroje al notar su lengua por la comisura de mis labios, eran increiblemete suaves. Tome la taza, tomando un largo sorbo, tomando esta vez una tostada, y poniendola con mantequilla y mermelada de fresa.

-Pues si, está deliciosa.-digo, mirandole intensamente y con esa misma sonrisilla pícarana de siempre, relamiendome los labios dulces por el sirope. Alargo la mano hacia la bandeja, cogiendo un croissant y dandole un bocado.

Le sonrei asintiendo con mi boca llena. Estaba bastanta hambriento, sentia que podia comerme una vaca y comer todavia mas. Tome otra tostada, pero solo con mantequilla, tomando otro poco mas del vaso.
- Dame un poco -
Dije abriendo la boca, esperando que me lo pusiera.

Le miré gratamente sorprendido. Y yo pensando que iba a ser el que se iba a zampar todo...
Acerco el croissant para que pueda darle un mordisco y justo cuando va a hacerlo, lo retiro.

Justo cuando lo iba a morder lo retiro de mi boca.
- Oye... dame de comer... que tengo hambre.-
Dije de manera bastante adorable.

Le volví a tender el bollo, dejando esta vez que lo mordiera.
-Mejor no digo lo que estaba pensando, que estamos comiendo.-digo, dandole otra sorbo al café.

Finalmente le di un bocado y sonrei complacido.
- No digas eso, que me dejas con la intriga, ahora me lo tienes que decir.-
Imaginaba por donde iba el asunto, pero queria saberlo.

Sonrei de lado.
-Quizás en otro momento. Ahora como...o te quedarás enano.-repongo, con cierto tono de burla.

Hice un mohin al oirlo, tomando otra tortita.
- ¡No me quedare enano! Soy capaz de ser mas alto que tu -
Dije tomando la tortita, a traganudos.

-Oh, pero yo veo tu futuro. Te quedarás enano~- continuo con la broma, terminandome el croissante y cogiendo una tostada la hunto con mantequilla.

Hice morros y termine mi leche.
- Yo como de todo y estoy fuerte, asi que seguro que crecere.-
Dicho esto, me tumbe en la cama, tapandome.

Observé con una ceja ligeramente alzada como se metía bajo las sábanas.
-¿Te has molestado por eso?-digo, pasando el dedo por encima de las sábanas, marcando su figura.

Lo miro sonrojado.
- No me enfade... solo me duele el trasero y tengo sueño.-
De nuevo me aferre a las sabanas.