No, no es una cita

**Hibari Kyouya** Dom Dic 12, 2010 9:04 pm

Decidí que el taxista nos dejara antes de lo previsto por varias razones: la primera era que no quería que el herbívoro supiera qué restaurante tenía en mente porque entonces se quejaría por no ser uno de los pijos que frecuentaba, la segunda era que probablemente llamáramos más la atención y la tercera que a mitad de camino nos encontramos demasiado tráfico y no pensaba quedarme esperando tanto tiempo. El problema ahora era que alguna de las chicas con las que nos topábamos podía reconocer al herbívoro a pesar de las gafas que llevaba y el cambio en el color del pelo.

De camino, comprobé que el "disfraz" funcionaba: escuché a dos chicas mencionar el nombre del herbívoro. Lo que me sorprendió (e irritó) fue que, según lo que dijeron, ellas eran dos de las fans que habían pedido que el herbívoro y yo posáramos juntos. De verdad, nunca lograría entender por qué les hacía tanta ilusión...

Cuando llegamos al restaurante, me giré hacia el herbívoro y le dije:

—El restaurante lo elijo yo porque seguramente tú elegirías uno de esos pijos.

Nada más entrar, fruncí el ceño: estaba a rebosar de gente y no me gustaba nada. La primera opción que se me ocurrió fue obligar a los camareros a que echaran a toda esa irritante gente, pero posiblemente se armaría un buen escándalo. La otra me pareció mejor, así que esperé hasta que se me acercó la camarera y le indiqué que quería estar en una sala aparte. Ella parecía sorprendida, me pidió que esperara un momento y enseguida volvió. Nos pidió que la siguiéramos y nos llevó hasta un balcón, donde sólo había una mesa y dos sillas.

La camarera nos hizo una reverencia y se fue diciendo que volvería enseguida. Me senté en la silla que estaba de cara al herbívoro y le avisé con cierta indiferencia:

—No pienses que lo tenía planeado; no me gustan las multitudes.

**Arakami Sasuke** Miér Dic 15, 2010 5:46 pm

Era la primera vez que no cuestionaba por el sitio al que me querían llevar, sabía que tratándose del enano sería un sitio simple y barato, pero no dije nada a pesar de que esos lugares me desagradaban mucho, siempre estaba lleno de gente y había mucho ruído...

No estuvimos en el taxi más de veinte minutos, lo cual agradecí ya que no me apetecía estar sentado más tiempo; cuando salimos pude ver a algunas chicas que hablaban sobre nosotros, pero por suerte no me reconocieron, supongo que por cambiarme el look y por las gafas de sol.

Después de entrar en el restaurante de lo que parecía un hotel de mala muerte y que nos llevaran hasta un sitio más tranquilo a petición del enano nos quedamos a solas en una de las mesas que había en una terraza privada, rápidamente pensé que él lo había planeado todo para tener una cita conmigo y aunque no fuera así era lo que parecía y lo veía divertido. Sin duda el enano es una caja de sorpresas...

Aún y así no dije nada, sólo anduve hasta la barandilla donde se podía ver todas la ciudad de noche, apoyé mis codos en ella y lo miré dibujando una sonrisa traviesa en mis labios.

—Aunque no lo tuvieras planeado, parece justamente lo contrario... —Acentué más la sonrisa convirtiéndola en una maliciosa y continué— : Que dos chicos cenen en un sitio como este y a solas... parece como si estuvieras a punto de proponerme matrimonio.
Solté una risita al imaginarme la escena de lo que yo mismo había dicho y luego a pesar de ver que mi comentario le había molestado y que pareciera que estuviera a punto de irse, me acerqué a él y sonreí esta vez sin malicia.

—¿O quizás lo haces para continuar lo de esta tarde sin que pueda sospechar?
Hice una mueca divertida y luego me senté en una de las sillas cruzándome de piernas y esperé a que vinieran los camareros.

Era tan divertido hacerle enfadar que podría pasarme horas haciéndolo.

**Hibari Kyouya** Vie Dic 17, 2010 8:14 pm

Lo miré con el ceño fruncido y estreché los ojos conforme lo escuchaba. ¿Por qué siempre tenía que hacerse el gracioso? Ese maldito herbívoro egocéntrico... Por culpa de su complejo de superioridad, me estaban entrando ganas de tirarlo por el balcón, seguro que eso no le parecería tan gracioso. Lamentablemente para él, la broma del matrimonio no iba a quedar ahí. Él lo había querido. Esperé hasta que se hubo sentado y entonces contraataqué, aún lo suficientemente molesto para no sonreír:

—¿Matrimonio...? Así que después de todo la Bella Durmiente se imagina un dulce y feliz final para su historia casándose con el príncipe. —En ese punto, la sonrisa burlesca acudió sola a mis labios—. Me temo que no es el caso, así que espero que no llores mucho por la decepción.

Era culpa suya por decir semejante estupidez, así que me aprovecharía para burlarme de él.

La camarera apareció en ese momento, lo que me dio una gran idea para provocarle un poco más, aunque... en otro sentido. Mientras ella nos mostraba la carta y esperaba a que eligiéramos, levanté una pierna y apreté el pie con fuerza contra la entrepierna del herbívoro. Mi sonrisa burlesca se transformó en una maliciosa al ver su expresión de sorpresa y comencé a mover lentamente el pie para provocarlo más. Después de apuntar mi pedido, la camarera se giró hacia el herbívoro a espera de que él le dijera que quería tomar y yo hice más presión para molestarlo un poco más.

**Arakami Sasuke** Dom Dic 19, 2010 12:21 am

El enano actuó tal como esperaba, no me molestó su comentario ofensivo porque sabía que lo que había dicho sólo era su modo de contraatacar para dejarme en evidencia. Él sabía perfectamente que no era un tío sentimental y mucho menos pensaba de esa forma...

Pensé en soltarle algún que otro comentario ingenioso que ya se me había ocurrido, pero en ese momento apareció la camarera interrumpiéndonos; mientras, el enano miraba la carta que le habían entregado, aproveché y me acomodé en la silla, esperando mi turno.

Poco después sentí una presión en mi entrepierna y abrí los ojos sorprendido, miré hacia el enano rápidamente. ¿En qué demonios estaba pensando ahora? En serio...

Empezó a mover el pie a lo laro de mi extensión y me tensé, mi cuerpo reaccionó casi al instante y eso me irritó; luego cuando la camarera me ofreció la carta chisté porque él había hecho más presión provocándome aún más, pero me mantuve sereno y levanté la mirada de la carta del restaurante.

—¿Podrías dejar de tocarme la polla con el pie? —pregunté en tono sarcástico sorprendiendo a los dos, la camarera por suerte no me había reconocido, punto a favor y el enano dejó de atormentarme de momento, entonces aproveché para mirar la carta de nuevo y añadí: —Para mí yokisoba.

La camarera avergonzada hizo una referencia cuando cogió la carta y se fue a paso apresurado.

**Hibari Kyouya** Dom Dic 19, 2010 9:54 pm

No me imaginé ni por un momento que me soltara aquello tan de repente y encima delante de la camarera. Por un momento, no supe cómo reaccionar y me quedé estático, mirándolo sorprendido. La camarera me miraba de reojo de vez en cuando, nerviosa, y pareció estar encantada de irse cuando el herbívoro le devolvió la carta. Bajé el pie y fruncí el ceño. Si no hacía algo rápidamente, ese herbívoro se regodearía por haberme dejado en evidencia.

Dirigí una mirada fugaz hacia la puerta por si volvía la camarera y volví a mirar al herbívoro. A continuación, acerqué más la silla a la mesa, apoyé un codo en ella y volví a sonreír de medio lado.

—Te vas a arrepentir de lo que acabas de decir —le avisé con mala intención.

Sabía que él se había dado cuenta de a qué me refería sin ser más específico. Por primera vez, iba a hacerle caso y a tomarme al pie de la letra lo que me había dicho. Tenía una buena oportunidad para comprobar hasta cuándo sería capaz de aguantar cuando quisiera lo contrario de lo que me había dicho, aunque lo cierto era que ya había comprobado lo testarudo que era...

Si iba a responder, no lo hizo porque la camarera volvió con nuestros pedidos, después, nos deseó que disfrutáramos de la comida y desapareció rápidamente. Cogí el primer takoyaki y me lo llevé a la boca con tranquilidad.

**Arakami Sasuke** Mar Dic 21, 2010 3:37 pm

Hice caso omiso a lo que me dijo justo cuando se fue la camarera, sabía perfectamente a lo que se refería, pero no me preocupaba realmente ya que yo siempre tenía un as bajo la manga y él debería saber eso.

Desvié la mirada y poco después entró la camarera con nuestro pedido, luego cogí los palillos para llevarme un poco de yokisoba a la boca y di un trago a la bebida mirando esta vez al enano fijamente.

—¿Qué se supone que intentabas hace unos minutos? —Suspiré cerrándolo unos segundos los ojos y luego volví a llevarme los palillos a la boca—. Te recomiendo que no vuelvas a hacer algo como eso, si no... —Hice una pausa y seguí— ...tendrás que hacerte responsable. —Terminé diciéndole, luego me señalé la entrepierna con los palillos y sonreí maliciosamente.

**Hibari Kyouya** Miér Dic 22, 2010 5:37 pm

Me imaginé que no me había entendido antes o no habría dicho semejante tontería. Quizá pensaba que yo no sería capaz de hacer lo que le había advertido... Bien, no tenía por qué ser algo en mi contra, sino todo lo contrario.

—¿De verdad tienes que preguntarlo o es sólo una excusa para que lo repita? —Seguí comiendo con tranquilidad y alcé la mirada del plato sin borrar la leve sonrisa que adornaba mis labios—. Además, ¿qué sentido tendría provocarte si yo mismo soluciono tu "problema"?

Había remarcado la última palabra para que se diera cuenta del doble sentido, tanto literal como... figurado. El herbívoro parecía no darse cuenta de que el hecho de actuar así lo hacía aún más evidente. Sabía que mi anterior jueguecito había tenido efecto y que posiblemente no quería que lo repitiera porque no sería capaz de controlarse.

**Arakami Sasuke** Jue Dic 23, 2010 8:55 pm

Esta vez parecía que no cambiaría de opinión tan fácilmente e incluso me daba a entender que no cedería como la última vez. Bien, él debería saber que podía recurrir a otras personas para satisfacerme, estaba muy equivocado si pensaba que me iba a tocar yo mismo porque él no quiciera hacerlo. Si eso era lo que había decidido lo respetaría por mucho que me jodiera de verdad.

—Me parece bien que no lo hagas entonces... —Le di un sorbo a la bebida y mostré una sonrisa sutil— . Recuerda que hay muchas personas que desean acostarse conmigo y que a mí no me importaría acceder.

Ver como su expresión iba cambiando conforme me iba escuchando fue divertido, al parecer si que se había olvidado de lo que era capaz...

—¿Piensas que por haberme acostado contigo varias veces ya no lo haría con alguien más..? — Sonreí maliciosamente, me apoyé en el respaldo de la silla y seguí—: No me hagas reír...

Me di cuenta que mis palabras sonaron muy duras una vez las dije; no era del todo cierto lo que le había dicho, antes de conocerlo si que habría sido capaz, pero ahora por alguna extraña razón... no podía simplemente hacerlo con el primero que se me insinuaba o flirteaba conmigo y me molestaba ser tan dependiente de él, tenía que hacerle ver que también podía evadir sus amenazas, que no me importaban...

**Hibari Kyouya** Sáb Dic 25, 2010 12:47 am

Borré de inmediato la sonrisa al oírlo. Se me había olvidado por completo... Ese estúpido herbívoro, ¿cómo se atrevía a chantajearme con lo mismo que nos había hecho discutir la noche anterior? ¿Acaso pensaba utilizar siempre a sus conocidos para obligarme a hacer lo que él quería? Debería levantarme en ese mismo momento y morderlo hasta la muerte por atreverse a sacar el tema. Odiaba que lo hiciera...

Muy bien, nunca había llegado a comprobar si de verdad sería capaz de hacerlo y yo no pensaba ceder. Tenía que dejarle claro de una vez que yo no era como los otros con los que había estado antes y que no podía manipularme según se le antojara. Terminé de comer sin contestarle, controlándome interiormente para no saltar encima de él y matarlo. Me tomé mi tiempo, no me di prisa ni mucho menos y cuando terminé volví a mirarlo y le dije, totalmente severo:

—Pide una habitación. —Se ve que no se esperaba que le dijera de repente eso y quizá me estaba malinterpretando, así que continué antes de que dijera alguna otra tontería—: Después llama a todos y cada uno de los hombres a los que conozcas y hazlos venir aquí. Una vez estén, les morderé hasta la muerte a todos juntos y así nunca más te atreverás a amenazarme con lo mismo. —Me levanté y añadí—: Es decisión tuya si quieres que lo haga antes o después de que te acuestes con ellos porque yo también voy a acompañarte.

Mentía. Si se atrevía a decir que los matara después de acostarse con ellos, él sería él siguiente. Esperaría hasta ver si de verdad era capaz de hacerlo conmigo delante y sin duda después los mataría a todos juntos.

**Arakami Sasuke** Sáb Dic 25, 2010 3:28 pm

Alcé una ceja al escuchar lo que dijo. ¿Ahora quería que pidiera una habitación? ¿quizás se había retractado de lo que dijo antes o simplemente era por una causa diferente? Sin dejarme responder siguió hablando y me sorprendí yo mismo por mi entereza cuando terminó de hablar.

Me mantuve impasible, dejé los palillos encima de la mesa lentamente y luego chasqueé la lengua.

—Me parece bien. —Dije con voz seria aguantando las ganas que tenía de lanzarme hacia él y romperle la cara, luego me levanté de la silla y contuve su mirada con expresión dura—. Espero que hayas traído dinero suficiente como para pagar la cena.

Después le di la espalda y anduve hacia la salida con pasos calmados, me dirigí a recepción y pedí la habitación más cara y espaciosa que tuvieran; por suerte no muchos famosos venían a este tipo de hoteles, así que no hubo problemas.

Cuando me dieron la llave de la habitación, me giré y se la enseñé al enano.

—Sin duda serás tú el que se arrepentirá de lo que acaba de decir.

**Hibari Kyouya** Sáb Dic 25, 2010 10:40 pm

Yo mismo le había dicho que lo hiciera, pero quizá esperaba que no aceptara y que terminara con toda esa tontería. No obstante, el herbívoro orgulloso aceptó, no parecía estar lo más mínimo afectado y mis ganas de matarlo se incrementaron. Chisté y dejé sobre la mesa cantidad más que suficiente de dinero para cubrir lo que habíamos pedido. Después, me reuní con el herbívoro, que acababa de pedir la habitación.

Me quedé mirándolo, impasible, y opté por no contestar a lo último que dijo. No iba a decirle nada, esta vez sí que no iba a detenerlo, así que me limité a seguirlo hasta la habitación en cuestión. Entré después que él y observé la habitación con ojo crítico. Me sorprendió bastante el hecho de que un restaurante tan normal dispusiera no sólo de hotel, sino de una habitación tan lujosa. Por alguna razón, eso me indignó aún más. El número de hombres que conocía debía ser mucho mayor de lo que yo creía...

Cerré la puerta con calma y, sin saber muy bien cómo, lo miré con una sonrisa de burla.

—Que no te sorprenda: si he accedido a pagar yo el restaurante ha sido sólo porque, tal y como dicen, es el hombre el que debe pagar a la mujer.

Ni yo sabía por qué le dije eso, pero ahora simplemente estaba tan irritado que necesitaba desahogarme de cualquier manera para no matarlo y burlarme de él siempre me había ayudado.

**Arakami Sasuke** Dom Dic 26, 2010 10:01 pm

Llegamos a la habitación rápidamente, abrí la puerta y entré sin mirar atrás; él enano cerró la puerta por mí y luego me di la vuelta para mirarle.

Fue un estúpido al decirme algo como eso, ¿Una mujer? ¿Hablaba en serio? Fruncí el ceño, muy enfadado y antes de que yo mismo me diera cuenta, anduve hasta él decidido y le di una bofetada con el dorso de la mano; fue un simple golpe, lo justo para desviarle el rostro hacia un lado.

Luego le sujeté por el cuello de la camisa y lo alcé acercándolo peligrosamente a mí.

—Tu mejilla hinchada demuestra que de mujer no tengo nada, así que cuidado con lo que dices imbécil.

Lo solté bruscamente y sin apartar la vista de él busqué en los bolsillos del pantalón buscando mi móvil.

**Hibari Kyouya** Lun Dic 27, 2010 4:50 pm

Mi única reacción fue abrir los ojos de par en par. Tenía que admitir que esperaba que me contestara con alguno de sus comentarios ingeniosos, no que me golpeara. Por si fuera poco, no sólo me subestimó como nunca haciendo ver que semejante golpe tal patético me dejaría marcas, sino que no cambió de opinión porque sacó el móvil. Ese simple gesto me cabreó mucho más que el golpe y ahora mi rabia era tal que sabía que no iba a ser tan fácil aplacarla, ni siquiera quería.

No aparté la mirada de él mientras marcaba un número y cuando lo vi llevarse el móvil a la oreja, llegué a mi límite. No, no le mordí hasta la muerte como debería haber hecho, no iba a demostrarle lo que me irritaba lo que iba a hacer, sino que le contesté en un torno aún más burlesco que antes:

—Ahí tengo que darte la razón. —Él me miró, pero no apartó el móvil. No pude remediarlo y entorné los ojos por la rabia, así que rápidamente esbocé una sonrisa maliciosa y terminé diciendo—. Las mujeres pegan más fuerte.

**Arakami Sasuke** Mar Dic 28, 2010 2:39 pm

Esta vez no me contuve, lo miré con ira y le golpeé con el puño cerrado en la mandíbula haciendo que del golpe diera unos pasos hacia atrás y se tambaleara.

¿Qué cojones pasaba con él? ¿acaso se había propuesto que ocurriera esto desde el principio?

Sin un ápice de remordimiento guardé el móvil en el bolsillo de nuevo y antes de que se incorporara del todo, lo estampé contra la pared y lo luego lo sujeté de las solapas de la camisa con firmeza.

—¿Puedes decir lo mismo ahora? —Dije con voz dura en un susurro y luego él me miró, su mirada destilaba arrogancia y una ira incontenible; aún y así no me intimidó. Estaba demasiado enfadado— . ¿Qué pasa, por qué sigues sacándome de mis casillas todo el tiempo, acaso estás buscando que acabe contigo?

Odiaba, realmente odiaba que se comportara así...

**Hibari Kyouya** Miér Dic 29, 2010 2:39 pm

El golpe me hizo perder el equilibrio, pero no llegué a caer. Ahora sí que no pensaba dejarlo pasar por alto, aquella vez no sería como la vez en que discutimos en su camerino por culpa de Suzuki. Giré lentamente las pupilas hacia él, pero antes de que pudiera devolverle el golpe, me empujó contra la pared.

Si el golpe ya me había cabreado lo suficiente, lo que dijo fue peor. ¿Me estaba tomando el pelo? ¿Cómo se atrevía a...? Era un estúpido si no entendía por qué estaba tan irritado cuando apenas unos segundos antes estaba llamando a alguien.

Entorné los ojos, por momentos más irritado, y le puse una mano en el pecho, sin obligarlo a alejarse de mí de momento.

—¿Acabar conmigo...? ¿Tú? No pensaba que tu ego fuera tan ridículamente grande como para creerte semejante tontería.

Por su expresión, supe que estaba más que dispuesto a volver a golpearme, así que reaccioné antes que él. Lo empujé con fuerza para que me soltara y, aprovechando que le había hecho trastabillar, saqué con rapidez las dos tonfas y lo golpeé con fuerza en el rostro. A diferencia de él, le di en la nariz. Lo hice a propósito para que sangrara porque sabía lo mucho que odiaba que le estropeara el rostro.

Su mirada al darse cuenta de que estaba sangrando me hizo sonreír con burla, aunque aún no estaba satisfecho porque estaba demasiado irritado.

—Vaya, me parece que vas a tener que aplicarte maquillaje extra, ya que he estropeado tu rostro perfecto —le dije con ironía.

**Arakami Sasuke** Jue Dic 30, 2010 4:17 pm

Aún no me acabada de creer lo que se había atrevido a hacer. Lentamente dirigí la mano hacia mi nariz, la separé con calma y observé como estaba manchada de sangre; me mantuve en silencio un par de minutos, inexpresivo y de repente una ira contenida y la frustración del momento me azotaron violentamente, queriéndolo matar de pronto.

Lo miré con odio infinito y volví a pasarme la mano por la nariz intentando limpiar la sangre que seguía saliendo poco a poco.

—Tú...,bastardo... —Susurré en tono amenazante y seguí— ...Te has atrevido a golpearme en el rostro... —Continué diciendo en el mismo tono, luego apreté la mandíbula con fuerza y fruncí el ceño mientras me abalanzaba sobre él rápidamente— . ¡¡Estás muerto!!

Lo empujé violentamente y usé tanta fuerza que lo tiré de espaldas al suelo, aproveché para subirme encima e impedirle que se moviera con mi peso y luego le di un puñetazo sin contenerme, partiéndole el labio inferior.

—¡¿En qué cojones estás pensando, eh?! —Lo cogí violentamente por el cuello de la camisa y lo acerqué hacia mí, luego seguí gritándole con furia— . ¡¡¿Haces que pida una maldita habitación para ver como me lo monto con otros y encima sigues jodiéndome con provocaciones y te atreves a golpearme?!!

Volví a golpearle, esta vez con el otro brazo y luego sentí como ese bastardo me golpeaba de nuevo, ahora en las costillas ya que por la posición no podía hacerlo en otro lado. El golpe que me dio provocó que lo soltara al momento, pero poco después y antes de que él actuara de nuevo le sujeté por las muñecas y añadí con un gesto de dolor:

—¿Y tú te crees muy hombre...? Usando un arma contra alguien desarmado sólo es de cobardes.

Todo se me estaba yendo de las manos, sabía que sólo caldearía más el ambiente provocándolo de esa manera, pero ahora mismo no podía pensar con claridad por el cabreo descomunal que me inundaba.

**Hibari Kyouya** Vie Dic 31, 2010 4:36 pm

No lo creí posible, pero cuando el herbívoro me golpeó otra vez, me cabreé aún más, dirigí rápidamente la mirada hacia él en el instante en que me cogió del cuello y comenzó a gritarme. Abrí más los ojos en un gesto de sorpresa y rápidamente transformé ese gesto en uno de rabia, apreté los dientes, entorné más los ojos en una mirada sombría e hice ademán de golpearle.

El herbívoro se me adelantó y esa vez contraataqué automáticamente. No le di en el rostro como habría querido, sino en las costillas y aproveché que me había soltado para volver a levantar la tonfa. Sin embargo, el herbívoro me inmovilizó cogiéndome de las muñecas. Apreté los puños e hice presión para tratar de alzar de nuevo las tonfas, sólo conseguí levantar un poco los brazos antes de que él me sujetara con más fuerza y aprovechara su posición para volver a inmovilizarme contra el suelo.

Sabía que no podría quitármelo de encima ya que su posición era favorable. La impotencia e ira acumulada me dominaban por completo, tal y como demostré al sujetar aún con más fuerza las tonfas, que no había soltado en ningún momento a pesar de su comentario y de la fuerza con la que me apretaba las muñecas, y al activar los pinchos. Me decidí entonces a ofenderlo para obligarlo a soltarme cuando tratara de golpearme y en ese momento lo mordería hasta la muerte.

—Tus pobres excusas para tratar de ocultar tu debilidad son inútiles. —Intenté alzar de nuevo el brazo, pero él me lo impidió. Chisté y cerré con más fuerza los puños en torno a las tonfas hasta el punto en que sentí un ligero escozor en las palmas de las manos—. Espero por tu bien que tengas un buen aguante porque en el instante en que me sueltes..., te morderé hasta la muerte.

Remarqué lo último que dije sílaba por sílaba y arrastrando las palabras en un tono inundado de odio.

**Arakami Sasuke** Dom Ene 02, 2011 2:02 pm

Sus respuestas sólo conseguían enfadarme más y más, hasta tal punto que no podía pensar con claridad; no recordaba haber estado tan enfadado nunca y mucho menos con esta opresión en el pecho que me molestaba aún más.

Chisté, lo miré inexpresivo y pensé en probar si sería capaz de seguir con aquello; si sería capaz de morderme hasta la muerte como tantas veces me había dicho ya.

—Siempre hablas de que me vas a morder hasta la muerte... —Sonreí con arrogancia y me arriesgué; me arriesgué porque sabía perfectamente que el enano no bromeaba, que en cualquier momento podía golpearme de nuevo y que yo con las manos vacías no tendría oportunidad de protegerme—. Bien, te lo pondré fácil. —Añadí seriamente sin apartar la vista de él, y fui soltándolo poco a poco, luego me acomodé en su pelvis y entonces lo noté.

Estaba empalmado, todo esto le había puesto cachondo y lo peor de todo esque yo me encontraba en la misma situación que él, entrecerré los ojos y aunque los dos seguíamos muy enfadados no hicimos nada. Después como si fuéramos imanes nos acercamos mutuamente.

Sí, de verdad nos habíamos vuelto completamente locos; hace unos minutos nos estábamos golpeando y ahora nos besábamos como si la vida dependiera de ello.

**Hibari Kyouya** Lun Ene 03, 2011 6:33 pm

No me moví hasta que me soltó del todo, en ese momento y debido al movimiento que hizo, me di cuenta de algo que me había pasado totalmente desapercibido a causa de la ira que me invadía. Él también se había dado cuenta, es más, él también se encontraba en la misma situación que yo.

Nos quedamos mirándonos el uno al otro y un segundo más tarde actuamos al mismo tiempo. Me incorporé y dirigí el puño cerrado contra su rostro, sin embargo, ni siquiera lo rocé, sino que solté la tonfa y lo sujeté con fuerza de la nuca. Él también se me había acercado, así que no llegué a incorporarme del todo, por lo que tenía el codo apoyado en el suelo para no caer. Sin embargo, fui incapaz de soportar mi peso por más tiempo y me dejé caer.

No nos separamos en ningún momento, seguimos besándonos con fiereza, tratando de dominar al otro. No me detuve ni al notar una leve molestia en el labio por culpa del golpe que me había dado antes, de hecho, el roce de sus labios y de su lengua me aliviaban y hacían suspirar de gozo. Llegado un momento, nuestros pulmones reclamaron aire, pero ni aun así me detuve, incluso cuando me pareció que él trataba de alejarse, lo sujeté con más fuerza de la nuca y aumenté el ritmo del beso a uno aún más pasional y desaforado. Aprovechábamos cualquier resquicio para respirar y finalmente nos separamos.

Ninguno de los dos dijimos nada durante un buen rato. De hecho, ni siquiera aparté la mano de su nuca ni tampoco la que tenía alrededor de su brazo. Después, él se separó la distancia justa para mirarnos a los ojos; yo no aparté la mano de la nuca.

—O me pegas o me besas, pero no las dos cosas a la vez o no sabré cómo he de actuar... —le reproché y añadí, esta vez sonriendo levemente con picardía—: ¿Acaso no me crees capaz de morderte hasta la muerte? Quizá deba hacerlo para demostrártelo, aunque... estoy seguro de que prefieres que lo haga en otro sentido.

**Arakami Sasuke** Miér Ene 05, 2011 2:51 pm

Como respuesta a su comentario sonreí con arrogancia ataqué con pasión su cuello, mordiéndolo y lamiéndolo de todas las maneras que se me ocurrían; en el mismo proceso fui desabotonando su camisa y pude notar como su piel reaccionaba al contacto de mi mano curiosa. Luego me separé de su cuello lo justo para poder observarlo y me relamí en un gesto sensual.

—No es que no crea que puedes hacerlo..., simplemente estoy convencido de que no podrías... —Hice una pausa para acercarme a su oído y finalmente susurré con picardía: ...Porque soy sé que soy el único que logra ponértela así de dura.

Rocé mi trasero descaradamente contra su entrepierna y sonreí divertido al escuchar su gemido desesperado. Me divertía que soltara todo eso con esa tranquilidad y arrogancia cuando sabía mejor que yo que el que quería todo esto desde un principio era él. ¿El empezó provocándome mientras cenábamos, no? Ah... Aún no podía entender en el momento que terminaron los golpe y la habitación se llenó de provocadores gemidos.

**Hibari Kyouya** Vie Ene 07, 2011 12:09 am

Era cierto lo que había dicho, pero bajo ningún concepto lo iba a afirmar tan a la ligera. De todos modos, él era el único con el que había estado, así que era cierto por pura lógica. En cualquier caso, yo sabía que su caso era idéntico al mío por mucho que tratara de ver que no... o al menos eso quería pensar. Si había aceptado llamar a todos los que conocía era sólo para irritarme como bien había demostrado en varias ocasiones, era evidente... Sin embargo..., no podía evitar desconfiar...

—Lo mismo puedo decir yo, ya que no paras de decir que tienes a muchos hombres dispuestos a acostarse contigo. No es que no crea que puedas hacerlo, simplemente... estoy convencido de que no podrías. —Sonreí con malicia y lo empujé con la mano que aún tenía en su nuca para atraerlo hacia mí y dejar entre nosotros una distancia de pocos centímetros—. Porque... yo también sé que soy el único que logra... ponértela así de dura...

Tenía pensado hacerlo yo, pero el herbívoro se me adelantó y me besó casi con la misma —si no más— voracidad que antes. Le seguí el ritmo de inmediato y entonces noté movimiento por su parte. Sin separarnos, se incorporó y se puso poco a poco en pie. Yo le seguí en todo momento y siempre sin separarnos lo más mínimo. Entonces, él comenzó a andar, por lo que me obligó a ir de espaldas. Fruncí el ceño, extrañado, pero no lo interrumpí y pronto choqué contra algo. Tras separarnos, me di cuenta de que me había llevado hasta el baño y lo que tenía detrás era el jacuzzi. Volví la mirada hacia él con una sonrisa burlesca y le dije:

—¿Qué, te pone hacerlo aquí?

**Arakami Sasuke** Miér Ene 12, 2011 8:46 pm

Fui arrastrándolo mientras nos besábamos con voracidad, él tenía sus manos sujetándome el rostro con fuerza y yo a su vez le sujetaba la cabeza por la nuca profundizando aún más el beso.

Poco después chocamos contra el marmol frío del jacuzzi, aunque podía sentir el vapor caliente que salía de allí; la simple idea de hacerlo en ese lugar me excitaba más... Luego para no variar habló con su habitual arrogancia, como si estuviera intentando que me sintiera avergonzado o algo...

Sonreí divertido mirándolo directamente y luego pasé por su lado mientras me deshacia de la camisa y el pantalón; le estaba dando la espalda pero sabía perfectamente que me estaba observando detenidamente, así que para provocarlo más no me quité los boxers y entré en el jacuzzi. Empecé a pasarme las manos lascivamente por el pecho, luego me di la vuelta y repetí el movimiento para que él me viera bien, me relamí los labios en un gesto obsceno y después le dije que se acercara con la mano mientras sonreía con provocación.
—¿A qué esperar para acercarte? sé que lo estás deseando...

**Hibari Kyouya** Lun Ene 17, 2011 12:24 am

Ni me sorprendía ni me ofendía su actual comportamiento: simplemente era lo que siempre hacía, ya lo conocía. Lo desconcertante era que, a pesar de saberlo, no podía evitar sentirme atraído por cada cosa que hacía y por si fuera poco él lo sabía; era algo que no podía permitir...

Sin decir nada, me acerqué al lado contrario del jacuzzi donde estaba él y luego me miré a mí mismo. Acababa de recordar que aquella ropa era suya y, dado la maniático que era con sus cosas, ¿cómo le sentaría que me metiera en el jacuzzi vestido? Sin duda alguna, era muy buena idea comprobarlo, así que sólo me descalcé y entré. Sin prestarle atención, me eché agua por encima de la cabeza y aproveché el gesto para provocarlo de manera disimulada y que pareciera que no lo hacía a propósito. A continuación, me pasé la mano por la camisa completamente pegada a mi cuerpo y lo miré. Si había logrado mi cometido, el herbívoro disimulaba muy bien. Todo lo contrario a mí... No lo entendía, no entendía cómo era posible que me hiciera sentir tan vulnerable, tan necesitado... Él conseguía desesperarme como nadie con la mínima cosa que hiciera... Era hasta desesperante...

Fruncí el ceño, me desplacé hacia él lentamente y me senté a horcajadas, de modo que sentí el contacto de su miembro erecto contra el mío. Ese simple roce me hizo hervir por dentro y el calor pareció multiplicarse por cien. Por alguna razón ajena a mi conocimiento, sentí deseos de morderle y hasta me vi obligado a cerrar la boca, que había mantenido abierta por la falta de aire.

—No sé por qué... —susurré con una mezcla de desconcierto e ira— me entran tantas ganas de morderte cuando te tengo delante. —Bajé la cabeza hasta su cuello y rocé con los dientes la piel—. Aunque no de la forma en que tendría que hacerlo.

**Arakami Sasuke** Lun Ene 17, 2011 3:33 pm

Mientras esperaba a que viniera, me senté dejando que el agua caliente cubriera parte de mi cuerpo, acomodé la cabeza en la orilla del jacuzzi y luego la giré para ver qué hacia. Me desesperaba que se hiciera el desentendido cuando podía ver en su mirada que quería comerme en más de un sentido de la palabra.

A pesar de lo que sin duda había intentando hacer para molestarme, me mantuve impasible; era cierto que en otra situación que se metiera con mi ropa en el agua sabiendo todas las sustancias que tenía y que podrían estropearla me hubiera enfadado mucho, pero ahora el caso era otro... Uno que sin duda me importaba mucho más.

Ver como la ropa —que le quedaba un poco grande— se pegaba a su cuerpo con el agua me provocaba mucho, por suerte él se acercó por fin y se sentó a horcajadas sobre mí. En seguida nuestros miembros hicieron contacto lo que provocó que soltaramos un ronroneo satisfecho, me relamí los labios sensualmente y luego le sujeté fuertemente por la cintura.

—Estoy seguro de que ya sabes la respuesta. —Respondí en modo jugueton a su divertido comentario—. Porque sólo tienes que mirarme para darte cuenta que soy tan sexy que no lo puedes soportar...

Intenté por todos los medios que el tono sensual de mi voz lo provocara aún más, luego con la mano derecha agarré sus cabellos y ataqué su cuello sin piedad, lamiéndolo lascivamente, mordiéndolo y besándolo por todas partes a la vez que lentamente empezaba a mover mi pelvis friccionando nuestras excitadas erecciones.

**Hibari Kyouya** Mar Ene 18, 2011 3:09 pm

Él se lo tomaba a broma, pero yo no porque sabía que tenía razón, al menos en lo primero que dijo: yo ya lo sabía, sólo que la razón era tan desconcertante que el simple hecho de preguntarme cómo era posible que fuera cierto me descolocaba aún más. El caso era que en ese momento yo me encontraba en un estado mucho más desesperado que él o al menos así me parecía. Mientras que él parecía estar en perfectas condiciones, yo tenía que hacer grandes esfuerzos por controlarme.

El roce más intenso entre nuestras erecciones me volvió más agresivo, hundí la cabeza en el hueco entre su cuello y hombro y le mordí, quizá más fuerte de lo que debiera, pero ahora me resultaba imposible controlarme si encima él me provocaba. Lentamente, sustituí los dientes por la lengua y le recorrí el cuello en sentido vertical hasta llegar a la oreja, la cual mordí de la misma manera antes de separarme lo justo para mirarlo a los ojos.

—Más bien me pareces un herbívoro ingenuo que no se da cuenta del peligro que corre si sigue provocando a su depredador.

Alcé la mano hasta su mejilla sin importarme el peso extra del agua acumulada en la ropa y con el otro brazo le aprisioné la cintura de la misma manera en que él me sujetaba. No aparté la mirada en ningún momento de él, una mirada hambrienta... Resultaba incluso ilógico el hecho de que despertara todas esas sensaciones en mí, por eso no iba a permitir que esto quedara así. Esbocé una sonrisa maliciosa y añadí a lo dicho anteriormente:

—¿No será que te gusta que el depredador te... "cace"... incluso más de lo que tú te imaginas y simplemente buscas alternativas para obligarlo a hacerlo sin que sospeche?

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