Un café, una tila...¡que más da! [cerrado]

Entré en la cafetería. Una cafetería grande, me gustaba y tenía lo que a mi más me gustaba, pasteles. Cuando tomo un pastel es como si mi personalidad cambiase y me volviese otra persona,más amable, más amigable, totalmente debil... pero debía aguantarme y intentar evitar como un pastel, al menos, no delante de la gente. Pedí un cafe solo, puede que hiciese mal ya que haría que mis nervios se disparasen, pero lo necesitaba.
Me fuí con mi café y unas galletitas que me habían dado y me senté en una de las mesas. - No hay nada como un café caliente... - Aquellas palabras no fueron escuchadas por nadie, ya que estaba solo en aquella cafetería. Solo estabamos el que me atendió y yo. - Me pregunto donde quedará la enfermería...cuando termine este café daré un largo paseo por la escuela, tengo que familiarizarme con ella para no perderme. - pensé mientras bebía sorbo a sorbo el café, que me estaba sabiendo a gloria.

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Bueno...al menos el café aqui es bueno - dijé cuando tomaba la ultima gota que quedaba en la taza - No me apetece seguir por aqui, creo que me iré a la habitación a leer o a escribir, cualquiera de las dos está bien. - pensé mientras me levantaba de la mesa y me dirigia hacia mi dormitorio.